Las tasas de interés se mantienen inamovibles tanto en Estados Unidos como en Europa, una señal de que la campaña de subidas impulsada por los bancos centrales está entrando en una fase de meseta.
La FED mantuvo sus tasas de interés referenciales en un máximo de 5,5% tras su reunión del miércoles, dejándolas en su nivel más alto en 22 años. Esto constituye una señal de que la campaña de subidas de tasas está alcanzando su meseta. La última vez que la FED subió sus tasas fue el 26 de julio.
El comunicado de la FED señaló que “la actividad económica se expandió a un fuerte ritmo en el tercer trimestre”, un hecho reciente que ha desconcertado a algunos economistas.
A pesar de que la Reserva Federal ha subido agresivamente las tasas de interés 11 veces desde marzo de 2022 en un intento de combatir la inflación, la economía de EE.UU no solo ha evitado una recesión hasta ahora, sino que se ha expandido a una tasa anualizada del 4,9% en el tercer trimestre, sobre todo debido al sólido gasto de los consumidores.
Aunque la inflación ha retrocedido notablemente desde el máximo de cuatro décadas alcanzado el verano pasado, se mantiene por encima del objetivo del 2% fijado por el banco central.
Sin embargo, es poco probable que la fortaleza económica del tercer trimestre persista, simplemente porque fue una anomalía. En los cinco años anteriores a la pandemia, entre 2014 y 2019, el crecimiento del PIB fue en promedio, de 2,6%.
Europa
El Banco Central Europeo (BCE) decidió la semana pasada, mantener sus tasas de interés referenciales.
Si bien no hay nuevas subidas, tanto la FED como el BCE descartaron cualquier posibilidad de iniciar el recorte contracíclico. Esto, pese a que los datos mostraban que la inflación de la zona del euro estaba cayendo rápidamente y la economía había comenzado a contraerse.